Cuando un bebé rechaza el pecho, lo mejor será que nos pongamos a observar cuál es el motivo para que esto ocurra. Un bebé jamás va a rechazar el pecho si tiene hambre, siempre que se den las condiciones. O sea, un bebé sano, que no presente malformaciones en su boca o enfermedades que le impidan una correcta succión, debemos pensar que algo le molesta. Tal vez no lo estemos sosteniendo en forma adecuada, o estamos muy ansiosas por prenderlo, y entonces no le damos el tiempo suficiente, o tenemos demasiada gente alrededor con sus diversas opiniones.
02 junio 2013
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