Nunca está de más recordarte que la lactancia materna tiene importantes beneficios tanto para tu bebé como para vos. Al bebé le aporta los nutrientes indispensables para un crecimiento adecuado.
En las primeras horas de vida el calostro proporciona las calorías necesarias, además de sustancias protectoras llamadas inmunoglobulinas. Si bien la cantidad de calostro parece escasa, es la adecuada, porque la capacidad gástrica de tu bebé es pequeña. A medida que pasan las horas, la producción irá aumentando de acuerdo con la demanda del lactante. Por eso, mami, no te sientas insegura: tu leche siempre es buena y lo alimenta en forma adecuada.

Un bebé amamantado tiene menos cólicos, o éstos se calman con mayor facilidad.